Lo que es mejor...

Definitivamente no siempre lo que es mejor para vos no necesariamente es mejor para mi y creo que así pensamos la mayoría. De hecho, se me ocurre que muchas de las cosas que pasan ¡es porque pienso en lo que me conviene a mi sin importarme los demas!

Ahora Dios, en la Biblia, a través de la pluma de un antigüo escritor expresa lo que es mejor... y ahora te invito a verlos muy rapidamente. En Eclesiastes...

1. Mejores son dos que uno; porque tienen mejor paga de su trabajo (4.9)
2. Mejor es el muchacho pobre y sabio que el rey viejo y necio que no admite consejos (4.13)
3. Mejor es que no prometas, y no que prometas y no cumplas (5.5)
4. Aunque el hombre engendrare cien hijos... si su alma no se sació del bien, y también careció de sepultura, yo digo que un abortivo es mejor que él. (6.3)
5. Mejor es la buena fama... y mejor el día de la muerte que el día del nacimiento. (7.1)
6. Mejor es ir a la casa de luto que a la casa del banquete (7.2)
7. Mejor es el pesar que la risa (7.3)
8. Mejor es oir la reprensión del sabio que la canción de los necios. (7.5)
9. Mejor es el fin del negocio que su principio; mejor es el sufrido de espíritu que el altivo de espíritu (7.8)
10. ...mejor es perro vivo que león muerto (9.4)
11. Mejor es la sabiduría que la fuerza (9.16)
12. Mejor es la sabiduría que las armas de guerra (9:18)

Si... algunos de estos "mejor es" como que todavía no me cierran del todo, mientras que otros suenan bastante razonables. Ahora, es lo que Dios expresa que es mejor.

Puedo y podés diferir de lo que "es mejor"... pero creo que si Dios lo puso de esta manera tiene que haber una razón; otro personaje de la antigüedad lo expreso de esta manera "Porque mis pensamientos no son tus pensamientos, ni mis caminos tus caminos, dijo Jehová. Como son más altos los cielos que la tierra, asi son mis caminos más altos que tus caminos, y mis pensamientos más que tus pensamientos" (Isaías 55.8,9) y ahí está la diferencia. Mi mente finita en comparación a la infinidad de Dios no alcanza a entender lo que es mejor. Por eso, vivir al estilo de Dios se trata de fe: creerle y vivir según lo que él propone.